Cuando tus hijos mueren de calor y te piden una bebida refrescante, tal vez lo primero que se te venga a la mente no sea precisamente un atole. Sin embargo, estas deliciosas malteadas, con la consistencia perfecta, te demostrarán lo contrario.
De distintos sabores —como fresa, vainilla, chocolate, cajeta, coco, nuez y guayaba—, sin importar el que elijas, agrégale mucho hielo y disfruta en familia de una cremosa alternativa que nunca imaginaste sabría tan bien.
Porciones: 4
Grado de dificultad: fácil
Tiempo de preparación: 15 minutos
Valor nutricional: fuente de energía
Ingredientes
Preparación
- Prepara el atole disolviendo el contenido de un sobre en dos tazas de leche fría.
- Hierve a fuego lento hasta conseguir la consistencia deseada por un par de minutos. Bate de forma constante para que no se pegue en el fondo.
- Deja enfriar durante cinco minutos.
- Licúa el atole con otras dos tazas de leche fría e incorpora el resto de los ingredientes: el azúcar y la vainilla.
- Sirve en un vaso repleto de hielos y decora con una ramita de hierbabuena para un toque aromático especial.
Así que ahora ya lo sabes, para que tus malteadas tengan la textura que siempre buscaste, el secreto es hacerlas con atole. ¡Pruébalas y me cuentas qué tal!
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