Una buena afeitada es parte de la rutina diaria de papá. A pesar de los años de práctica, si no se tienen los cuidados necesarios, este simple proceso puede resultar en piel enrojecida y reseca.
Sin importar el tipo de piel, esto se puede evitar con unos cuantos tips muy fáciles de poner en práctica. Aquí te los cuento para ese acabado digno de estrella de la televisión.
Preparar la piel
Un baño caliente o lavar la cara con agua pueden hacer toda la diferencia. Esta preparación ayudará a abrir los poros para que la piel y la barba estén más suaves y no tengan tanta resistencia a la navaja de afeitar. ¡Esto facilitará mucho las cosas! Después de esto te recomiendo aplicar una crema para antes de pasar la navaja y evitar los problemas más comunes de irritación.
Vigila el estado de la navaja
Este es otro punto que muchas veces se pasa por alto. La mayoría de los expertos recomiendan cambiar las navajas después de 8 a 10 usos. De otra manera, la navaja no tendrá filo y estará llena de bacterias. Esto crea el terreno ideal para cortadas y el enrojecimiento. ¡Algo que no queremos, por supuesto!
Aplica un bálsamo
Una vez afeitado, la hidratación de la piel es muy importante. Para esto, existen muchos productos que pueden ayudar a reducir el enrojecimiento, pues relajan la piel y cierran los poros. Una loción after shave también es útil, solo asegúrate que no contenga alcohol para evitar la irritación.
Considera usar una máquina
Si a papá no le gusta utilizar la navaja, una máquina de rasurar es la opción perfecta. Tal vez no le otorgue una afeitada al ras, pero puede adoptar ese aspecto de barba de tres días que crea una apariencia natural sin maltratar su piel.
Celebra a papá en su mes con los productos y accesorios que harán que luzca mejor que nunca.
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