Cuando llegas a casa, es muy importante tomarte unos minutos para ti misma. Conforme se juntan las tareas del hogar con las responsabilidades del trabajo, es normal que puedas sentirte un poco cansada y estresada.
Yo he aprendido a relajarme haciendo algunas actividades que me hacen sentir renovada. Te comparto 5 ideas para que pruebes desde la comodidad de tu casa.
Respira
Así como lo escuchas, escuchar tu respiración es un elemento clave para relajarte de manera plena y profunda.
Siéntate en un lugar tranquilo, endereza tu espalda y coloca las manos sobre tus piernas. Cierra los ojos y comienza a respirar lentamente. Inhala y mientras lo haces cuenta hasta cinco.
Ahora exhala y ve sacando el aire mientras cuentas otros cinco. Este ejercicio es muy efectivo y en dos minutos sentirás un gran alivio interno. Comienza con uno o dos minutos al día y ve subiendo gradualmente hasta llegar a 10.
Toma un baño relajante
Después de un día atareado, nada como darte un baño relajante antes de ir a dormir. Pon a calentar el boiler, enciende un par de velas y prepárate para vivir una experiencia renovadora.
Para que la experiencia sea completa, te recomiendo comprar inciensos y un aceite esencial. Prende un incienso, abre la regadera y concéntrate en la sensación de las gotas cayendo sobre tu cuerpo. Ahora, masajea tu cuerpo con el aceite desde los tobillos hasta los hombros durante 10 minutos.
Enjuágate y relájate durante cinco minutos más en la regadera. Estoy segura de que después del baño tu cuerpo y tu mente se sentirán increíbles.
Mejora tu circulación… ¡en el sillón!
Aunque no lo creas, tirarse al sofá puede tener grandes beneficios. Acuéstate boca abajo, pon tus piernas en alto y mantenlas ahí de dos a tres minutos.
Ahora, pon tu mano sobre el pecho para sentir tu respiración. Inhala profundamente y exhala lentamente el aire por la boca. Repite este ejercicio durante un minuto y trata de no pensar en otra cosa que la respiración.
Con esta rutina, tu ritmo cardiaco se normalizará, descansarás tus piernas y lograrás que la sangre fluya mejor en tu cuerpo.
Prepárate un té
En ocasiones, sentarte a disfrutar de un té relajante puede hacer una gran diferencia en tu día. Esta bebida tiene muchos beneficios y lo mejor es que se perciben de inmediato.
Hay algunas plantas como la valeriana que son tranquilizantes naturales que alivian el estrés y la ansiedad. Prepárate una infusión y siente cómo tu cuerpo se relaja en minutos.
Aplícate una mascarilla
La belleza y la relajación están muy conectadas. Cada que dedicas tiempo a mejorar tu apariencia, contribuyes a generar un sentimiento de bienestar en tu mente y tu cuerpo. Aplícate una mascarilla, tírate en un sillón concéntrate en ti sin interrupciones durante 15 minutos. Estoy segura que te sentirás mucho mejor cuando te enjuagues tu cara.
Saber relajarse en casa puede hacer una gran diferencia en nuestra vida diaria. Sigue mis tips y verás que pronto te sientes aliviada y con las pilas recargadas para seguir adelante.
