Como padre, es complicado descubrir que nuestro hijo sufre de bullying en la escuela. La mayoría de las veces, los niños ocultan esa situación por miedo o por pena. Por ello, es muy importante mantener la comunicación con tu peque para prevenir o ayudar a enfrentar este problema. Si sospechas que tu hijo es acosado, respira profundamente y sigue mis consejos para fortalecer su confianza.
Escucha a tu hijo
Lo primero y más importante es dejar que exprese lo que siente sin ser juzgado. Empatiza con él, percibe su miedo y no le pidas hacer algo para lo que no está preparado.
Desarrolla su confianza
Déjale claro que tiene derecho a sentirse seguro y feliz, que ser acosado no es su culpa. Además, evita pedirle que se defienda, al menos no de una manera violenta y directa.
Forja lazos de empatía
En muy importante dejarle en claro que estás de su lado. Pregúntale cómo cree que puedes ayudarle: esto lo hará sentir una mayor confianza para abrirse contigo.
Explica las diferencias
Explica a tu peque la diferencia entre «delatar», “acusar” y «contar” o “pedir ayuda». Las primeras dos opciones lo meterán en problemas con un compañero y las segundas permitirán protegerlo.
Refuerza su autoestima
Una manera de hacerlo sentir más seguro, es valorando todas las cosas que hace bien. A la hora de fortalecer su seguridad, es fundamental enfocarse en lo positivo y destacar sus aciertos, nunca sus errores.
Respuesta frente al acoso
Los acosadores disfrutan del poder, de sentirse superiores y generar miedo. Es clave que tu hijo aprenda a minimizar el impacto del acoso, al menos frente al acosador. Si ve que sus insultos ya no afectan a tu hijo, es mucho más probable que se canse de molestarlo.
Además de seguir estos consejos, te recomiendo pedir una cita con el maestro de tu hijo y/o con el director de la escuela para saber si ellos conocen la situación. Coméntales lo que sabes y pregúntales qué medidas se pueden tomar para cambiar esta situación.
