¡No más gérmenes! Limpia tu baño y déjalo brillante
Húmedo y caluroso, el baño tiene el ambiente ideal para que los gérmenes y las bacterias se reproduzcan sin que lo notes: la regadera, los contactos de luz, la llave de la puerta y hasta en tu cepillo de dientes.
¡Que no cunda el pánico! Hoy te enseñaré cómo eliminar los gérmenes para dejar el baño más brillante que nunca.
Antes de desinfectar el baño, mi primera recomendación es que protejas tus manos con guantes de látex. Una vez preparada, limpia toda la superficie de la taza con una mezcla de cloro y jabón. Como el excusado es la principal fuente de gérmenes del baño, mi recomendación es hacerlo dos veces por semana.
Cambia las toallas y limpia los artículos de higiene
Además de un olor desagradable, la humedad en las toallas del baño atrae gérmenes. Cámbialas cada 3 o 4 días. Tenderlas diariamente un par de horas al sol evitará el olor a humedad.
Te recomiendo guardar los artículos de higiene en algún compartimento para evitar que se contaminen. Cada tercer día puedes lavar tu cepillo de dientes con un poco de bicarbonato de sodio o un chorrito de enjuague bucal.
Libera de sarro tu regadera
La regadera es un lugar que generalmente olvidamos limpiar. Para librarla de gérmenes hay que desatornillarla y dejarla sumergida en vinagre blanco durante 20 minutos.
Tip: si no puedes desatornillar la regadera, llena una bolsa de plástico a la mitad con agua y vinagre. Sujétala con una banda elástica o con varias ligas a la regadera. Déjala toda la noche: ¡amanecerá como nueva!
No olvides las cortinas
Las cortinas del baño están en contacto directo con el agua y acumulan grandes cantidades de gérmenes en poco tiempo. Para mantenerlas limpias, métela en una cubeta con ¾ partes de agua y dos tazas de vinagre blanco.
Tip: Para limpiar los azulejos del baño, las llaves de las puerta y los contactos de luz; resulta muy práctico rociar una mezcla de agua, sal de grano y vinagre blanco con un atomizador. Deja actuar unos minutos y seca perfectamente con un trapo limpio.
Ventila tu baño
La ventilación es una arma para combatir la humedad y por lo tanto la formación de moho en tu baño. Abre las ventanas y deja que circule el aire fresco.
Espejito, espejito, ¿quién es la reina de limpieza?
El toque final es un espejo limpio y brillante. Para lograrlo, basta rociar un poco de vinagre blanco con agua para que quede rechinando de limpio.
Tip: La mejor manera de secar el espejo es utilizando papel periódico o un trapo seco que no suelte pelusa.
Ahora que aprendiste a combatir a los gérmenes, estoy segura que tú y tu familia notarán una gran diferencia. Con mis consejos, ¡Tendrás el baño más limpio del vecindario!