Me encanta la cara de sorpresa de mi familia cuando los consiento con un platillo especial e inesperado. Si hay un momento ideal para hacerlo, ¡ese momento es la cena de Navidad!
Quiero contarte acerca de una versión del clásico arroz blanco que he perfeccionado para la gran noche: arroz navideño gratinado.
Se trata de un arroz cremoso, lleno de sabor y coronado con una abundante capa de queso derretido. ¡Un auténtico manjar navideño!
La guarnición navideña perfecta
La cena de Navidad es una ocasión para cocinar platillos especiales y ponerle un giro inesperado a las recetas de siempre. Por eso, este arroz gratinado es la guarnición perfecta para este día, ya que añade varios niveles de sabor a un platillo clásico. Ya sea para acompañar un delicioso bacalao, un rico pavo horneado o un suculento lomo de cerdo, ¡es infalible!
El ingrediente secreto
Aquí entre nos, el ingrediente secreto en esta receta es la margarina Iberia. Me encanta porque, además de ser hecha con aceites 100% vegetales, se puede usar para: freír, guisar, hornear o untar, es súper versátil. ¿Colesterol? Olvídate de él, ya que por su origen no lo contiene. Además, es libre de grasas trans por porción gracias a su proceso de elaboración.
Ahora que te he revelado mi secreto, estás lista para poner a prueba esta mágica receta. A ponernos el delantal y… ¡a cocinar!
Ingredientes
- 1 taza de arroz blanco
- 2 cucharadas de margarina Iberia
- 2 tazas de agua tibia
- 4 cucharadas de crema ácida
- 200 gramos de queso tipo Oaxaca, deshebrado
- Sal y pimienta
Preparación
Un buen tip para preparar el arroz perfecto es lavarlo primero. Para esto, vierte la taza de arroz crudo en un tazón y llénalo con agua, hasta que cubra el arroz por completo. Hazle “masajito” a los granos de arroz para que vayan soltando el almidón. Escurre, enjuaga el arroz, vuelve a llenar el tazón con agua y repite el proceso con las manos hasta que el agua se quede transparente (quiere decir que ya no hay almidón).
En un sartén, a fuego medio, pon a derretir la margarina Iberia. Agrega el arroz, el agua y salpimienta al gusto. Deja cocinando y, cuando el agua se haya evaporado por completo, agrega la crema y revuelve.
Agrega el queso Oaxaca deshebrado hasta crear una capa por toda la superficie del arroz. Tapa la olla y apaga la estufa. Deja que el calor gratine el queso durante un par de minutos y sirve bien calientito.
Una alternativa es poner el arroz con la crema en un refractario, agregar la capa de queso y hornear a 180 °C hasta que el queso se gratine. Queda igual de rico, pero el queso adquiere una textura un poco más dorada. ¡Delicioso!
Esta receta de arroz gratinado será todo un éxito en tu cena de Navidad. Sobre todo, porque lleva mi ingrediente favorito: margarina Iberia, ¡el secreto que a todo da sabor!
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