¿Te cuesta trabajo saber cuándo debes deshacerte de tus cosas? Mantener tu clóset organizado es una tarea que a simple vista parece sencilla, pero que involucra muchas emociones: pues es muy difícil despedirse de una prenda.
Además, es fácil seguir comprando ropa y artículos similares a los que tienes, ponerte las mismas cosas y un día encontrarte con una montaña de atuendos. Que no te vuelva a pasar.
Prepárate
Existen algunas cosas que puedes hacer antes de reorganizar tu clóset. La primera es tener a la mano bolsas de plástico para sacar las prendas que no quieras; puedes pensar en términos de vender, donar o tirar. Papel y lápiz también serán útiles para apuntar todo lo que tienes y lo que te haga falta.
Reglas para descartar
Es necesario tener un sistema para dejar ir aquellas cosas que nada más ocupan espacio en tu clóset. Considera lo siguiente:
- Si tienes prendas similares, quédate con un par al menos que sean parte de tu uniforme de trabajo.
- Si no has utilizado una prenda en un año, es altamente probable que no la necesites; con las excepciones de la ropa de temporada o para ocasiones especiales.
- Si esa blusa o pantalón ya no te quedan, es momento de decir adiós. Nada de que el lunes ahora sí empiezas la dieta.
Organiza
Una vez que depuraste tu clóset, toma unos minutos para organizarlo. Lava o lleva a la tintorería la ropa que lo requiera. De ser posible, ordena tus prendas por color, así podrás armar combinaciones en minutos y ahorrar tiempo por las mañanas.
Por lo general se recomienda que lleves a cabo esta tarea un par de veces al año. Así que crea un recordatorio para no pasar por alto la oportunidad de tener un clóset organizado.
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