Beneficios de hacer los quehaceres escuchando música
Nadie dijo que hacer los quehaceres de la casa sería fácil, pero hay veces que de plano no dan nada de ganas de hacerlos. Una de las cosas que puedes hacer para que sea una actividad más placentera es escuchar música.
Te diremos cuáles son los beneficios de escuchar música mientras limpias, recoges, cocinas y acomodas (y cuál es la mejor forma de escucharla).
Eres más productiva
Escuchar música aumenta la productividad en cualquier tarea que se esté realizando, y los quehaceres de la casa no son la excepción. Esto es porque la música hace que ciertas tareas repetitivas sean más placenteras. También porque escuchar melodías con las que estamos familiarizadas ayuda a enfocarnos.
Estás de buen humor
La música tiene una gran influencia en nuestro estado de ánimo y, si estás de buen humor, vas a realizar tus quehaceres más rápido y mejor. Salsa, cumbias, pop, rancheras o cualquiera que sea el género que te ponga de buenas, ese es el que tienes que elegir para las tareas del hogar.
Se pasa el tiempo más rápido
La música altera la manera en la que percibimos el paso del tiempo. Si estamos escuchando uno de nuestros discos favoritos, el tiempo se pasa más rápido y todo es más ameno. Esto aplica también cuando estamos haciendo labores de limpieza y organización en la casa mientras escuchamos música.
Te sientes motivada
¿Has visto cómo la gente escucha música mientras están en el gimnasio? Esto es porque se ha demostrado que la música puede generar motivación en las personas para que realicen retos y tareas difíciles. Puedes aplicar este mismo principio y hacer una lista con canciones de rock o cualquier género que te haga sentir empoderada. ¡Ninguna tarea te va a intimidar!
La mejor forma de escuchar música
Los audífonos pueden ser molestos y estorbosos a la hora de escuchar música y las bocinas de los teléfonos no son muy buenas. Es por eso que tu mejor opción para poner música mientras trabajas es una bocina bluetooth portable, que se conecte a tu teléfono sin cables y puedas controlarla desde ahí.
Lo mejor de estas bocinas es que hay muchas, para todos los gustos y presupuestos, y que puedes ordenarlas en línea fácilmente. Pide la tuya y ponla en un lugar céntrico de la casa. Súbele el volumen y ¡a darle!